miércoles, 19 de septiembre de 2012

Humberto Maturana

Humberto Maturana Romesín


  • Desarrolló en la década de los setenta el concepto de autopoiesis, el que da cuenta de la organización de los sistemas vivos como redes cerradas de autoproducción de los componentes que las constituyen. Además, sentó las bases de la biología del conocer, disciplina que se hace cargo de explicar el operar de los seres vivos en tanto sistemas cerrados y determinados en su estructura. Otro aspecto importante de sus reflexiones corresponde a la invitación que Maturana hace al cambio de la pregunta por el ser (pregunta que supone la existencia de una realidad objetiva, independiente del observador), a la pregunta por el hacer (pregunta que toma como punto de partida la objetividad entre paréntesis, es decir, que los objetos son traídos a la mano mediante las operaciones de distinción que realiza el observador, entendido éste como cualquier ser humano operando en el lenguaje).


  • Profundizó su trabajo junto con su discípulo y luego colaborador Francisco Varela. Humberto Maturana es fundador, junto a su aprendiz Ximena Dávila Yañez, del Instituto Matriztico.



Objetividad entre paréntesis

Es una expresión acuñada por el científico chileno Humberto Maturana para referirse al papel de la objetividad en los criterios de validación de las explicaciones científicas, que para este autor debería ser puesta "entre paréntesis" ya que el conocimiento es una construcción en el lenguaje y no la captación de una realidad independiente del observador. Este concepto tradicional de la objetividad lo denominaría como objetividad trascendental.

  • La objetividad entre paréntesis se sustentaría en el determinismo estructural de los sistemas vivos, que se relacionarían con su entorno dentro de las posibilidades de su constitución estructural. Así lo percibido del mundo exterior correspondería a una construcción hecha por el observador a partir de su estructura y tiene que ver con su historia de cambios estructurales, más que con el agente que perturba sus sistemas sensoriales, que en sí mismo no tiene el poder de generar los cambios de estado que tuvo el sistema que observa. Así, una aprehensión objetiva del entorno es imposible por la misma constitución estructural de los seres vivos, que sólo pueden procesar de su entorno aquello que su estructura permite. Por ejemplo, la visión "objetiva" del entorno depende de la constitución estructural del ojo del sujeto.
  • De la misma forma, Maturana advierte de la incapacidad de distinguir entre el error y la ilusión de una vivencia en el momento en que ocurre. Por lo tanto todo es vivido como real al momento de vivirlo, y es una operación de abstracción posterior la que otorga este carácter a cualquier experiencia, que a su vez se basa en otra experiencia cuyo carácter de realidad también está sujeto a las mismas reglas. Así, las explicaciones que un observador construye están también cimentadas en su historia de cambios estructurales, que puestas en el lenguaje se construyen en base a distinciones hechas en él por una comunidad en particular. Los consensos científicos sobre la verdad, entonces, tendrían una validez restringida, y el argumento de la objetividad no resultaría válido para sostener que la verdad científica tiene un carácter privilegiado frente a otras formas de concebir la realidad.




No hay comentarios:

Publicar un comentario